Wikipedia define cosmovisión como visión del mundo, es una imagen o figura que una persona o sociedad se forman del entorno que los rodea, en palabras sencillas la cosmovisión es la forma como una persona ve el mundo que le rodea; a partir de estas cosmovisiones las personas interpretan su propia naturaleza y la de todo lo existente.
Así que una persona vive lo que vive, de acuerdo con la cosmovisión que tiene del mundo. Por ejemplo, la forma en que una persona vive su matrimonio, está completamente conectado con la cosmovisión que ésta persona tiene del matrimonio. La vida, la muerte, el trabajo, los hijos, etc. Todos estos conceptos usualmente se adquieren del entorno, del mundo que rodea al individuo.
Hace un tiempo había un corto que daban en Cine-Colombia acerca de la cultura de los "ombligados", en dicho corto le preguntaban a uno de los ancianos de la cultura qué pasaba después de la muerte, y la respuesta de este anciano fue: ¨nada sucede, vida solo es esta, el que crea que hay algo después de la muerte es porque lo engañaron¨. ¿De dónde sacó este anciano esa posición?, seguro hace parte de su cultura, su cultura le dio esta información y ahora él vive como vive, porque, tiene una cosmovisión en la cual, después de la muerte no pasa absolutamente nada; y de seguro esto determinará en gran manera, como vivirá la única vida que él cree tener.
Así que ninguna persona puede estar desligada de esto, no puede decir yo no tengo una cosmovisión, yo actuó según cada momento, pero realmente esto es imposible, todos actúan de acuerdo con una cantidad de conceptos aprendidos de su entorno; se aprenden de los padres, se aprenden de la escuela, del colegio, los periódicos, la televisión, la música, y de muchos otros factores determinantes en la cultura.
En los tiempos de la Iglesia Primitiva esto no fue diferente, muchos de los problemas que tuvo que enfrentar la iglesia naciente fue con los Judíos, quienes tenían una cosmovisión religiosa. No podían aceptar el Cristianismo, porque, era diferente a la forma como ellos interpretaban su religión. El apóstol Pablo escribe a la iglesia de Roma que era necesario que ellos renovaran o que fueran transformados en su forma de pensar, para que, pudieran entender claramente la buena, agradable y perfecta voluntad de Dios (Romanos 12:1-2). Lo que intento decir, es que Dios desea que nosotros tengamos una cosmovisión, pero, esa cosmovisión tiene que ser la de Dios. Dios desea que nosotros vivamos nuestra vida según la cosmovisión del reino de los cielos, pero está claro que esta cosmovisión es completamente contraria a la cosmovisión de este mundo.
Este mundo, es un mundo caído afectado de manera total por el pecado, y cuando digo de manera total, estoy diciendo que el pecado ha afectado cada parte de este mundo. El hombre, es un hombre caído cuyos pensamientos no son los de Dios, sino, precisamente los del príncipe de este mundo; el que la Biblia llama Satanás (Efesios 2:1-3). Es por esta razón, que debe ser menester de todo cristiano renovar su mente, ser transformado en su cosmovisión de vida, pensar ya no como piensa el mundo, sino, como Dios piensa; y para lograr esto se necesita una intervención divina. Esta intervención divina es obrada por el Espíritu Santo cuando el cristiano toma las Escrituras -Biblia- y la estudia, profundiza en ella, medita en ella, la memoriza, mientras ora para que el Espíritu Santo aplique todas estas cosas a su mente y a su corazón.
El mundo nos amoldó a él, ahora el llamado es para salir de ese molde y amoldarnos a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo (1 Timoteo 6:3), palabras que están claramente expresadas en las Sagradas Escrituras. Mientras nuestra mente no sea renovada, realmente no podremos comprender la cosmovisión de Dios, y por tanto, no entenderemos que Su voluntad es buena, es agradable y es perfecta. ¿Por qué muchas veces parece que la voluntad de Dios es mala? Muy sencillo, porque nuestro molde todavía es el molde del mundo, no el molde de las sanas palabras de Cristo.
Hermanos, el llamado es a vivir según la voluntad de Dios, pero, no podremos vivir nunca según la voluntad de Dios si no salimos del molde del mundo y nos conformamos a las sanas Palabras de nuestro Señor Jesucristo, que son conforme a la piedad. Todo el molde del mundo tiene que ser destruido, no traes nada del mundo que pueda permanecer en esta nueva vida (2 Corintios 5:17), nada; nada de lo que traes del mundo está amoldado a Dios sino amoldado al mundo, así que no puedes conservar nada, todo tu ¨yo¨ tiene que ser destruido y todo tu pensamiento tiene que ser renovado, y podrás entonces vivir según Dios y no según tu criterio.